Publicado en: Quilmes
Octubre 2013
Es reconocido por todos que el proceso moderno de desarrollo
implica una gran transformación de los distintos elementos de la
sociedad, ya sea en el plano económico-material, como político,
cultural, ideológico y espacial. Esta transformación depende, en
una gran medida, de una expansión, nunca antes vista, de la capacidad
productiva a través de la elevación de los promedios de
productividad por trabajador la cual favoreció la elevación de los
promedios de ingreso por persona. Ligado a esto se producen
cambios en la estructura de clases y grupos y en la organización
social, junto a transformaciones culturales y de valores y cambios
en las estructuras políticas y de poder. Este gran proceso de transformación
no está exento de conflictos; por el contrario, hasta el
presente toda una serie heterogénea de conflictos en diversos planos
integra este proceso de transformación.