Director: Dr. Guillermo de Martinelli
En este proyecto pretendemos identificar y analizar las “bases materiales” que constituyen la hegemonía del actual modelo agrario, considerando los elementos que la tensionan, revisando cómo se despliegan a nivel local estos procesos.
Ambas perspectivas de análisis han tenido desarrollos diferentes dentro del campo de los estudios agrarios, aunque la articulación entre las mismas ha carecido de abordajes sistemáticos. En este sentido, el conflicto agrario del año 2008 representó un momento especialmente interesante para observar cómo los elementos estructurales y las dinámicas políticas deben necesariamente considerarse para lograr una compresión más profunda de las lógicas que asumen los fenómenos sociales, poniendo en evidencia los circuitos a través de los cuales el capital agrario se expresa. Al respecto diferentes autores avanzaron en esta dirección, aunque los análisis se vieron fuertemente limitados al conflicto en si mismo, dejando de lado la posibilidad de indagar en procesos más extensos que escaparan a las lógicas que imprimió la coyuntura en torno al conflicto del 2008.
El presente proyecto se propone analizar cómo impactan las transformaciones de la estructura agraria en los reacomodamientos de las clases y fracciones de clase, a partir de las modificaciones económicas que experimentan los sujetos, sus intereses y las formas en las que se articulan. Nos interesa conocer cómo han impactado estos procesos entre los distintos actores agrarios, qué tipo de rearticulación de posiciones se ha configurado y cuál es el carácter que asumen las nuevas interdependencias. En el marco de las recientes transformaciones, podemos observar cómo un exchacarero se puede convertir en un rentista, quedando integrado a la dinámica económica de la empresa que le alquila su tierra, o bien en un prestador de servicios agropecuarios que pasa a depender de la demanda que puedan hacer otros productores de dichos servicios, o bien pasan a integrar, junto a otros actores, proyectos de inversión en sociedad. El impacto a nivel local de los procesos estructurales que define el nuevo modelo de desarrollo agrario también se expresa en puntos de tensión entre distintos actores del sector que pujan por posicionarse como nodos relevantes en el entramado posible por donde circula el capital agrario. En este sentido, se vuelve relevante analizar en qué medida estos cambios afectan a otros actores, como cooperativas, agronomías, cerealeras, tambos y molinos.
De este modo, los cambios estructurales reconfiguran la base material que garantiza la hegemonía de un determinado modelo de desarrollo agrario. Sin desconocer los aspectos ideológicos que intervienen en la consolidación de la hegemonía, en el presente proyecto nos centraremos en explorar las bases materiales de esta hegemonía, y en particular, en analizar cómo opera a nivel local el despliegue del actual modelo de desarrollo agrario.
Este proyecto se propone estudiar cómo se construye la articulación entre los elementos estructurales y sus dinámicas locales, y las mediaciones que intervienen en construcción de la hegemonía en dichos espacios, observando especialmente la influencia que posee la estructura agraria y los procesos de circulación de capital asociados al agro que se despliegan en los territorio, en la constitución de la misma, como así también los sujetos que la encarnan y hacen posible dicha construcción.
Se pretende contribuir al análisis respecto de cómo los procesos hegemónicos en el capitalismo se vinculan con dinámicas económicas, productivas y socio-políticas que implican un específico modelo de desarrollo global y local, considerando asimismo las resistencias, tensiones u obstáculos que para ello podrían encontrarse, así como también las alternativas (en términos prácticos y/o discursivos) que podrían existir. Todo ello teniendo como objeto de análisis el modelo agrario pampeano contemporáneo y sus disputas.